Recuerdo cuando nos decian que todos somos Marcos (el wey ése que se saco el premio Kodak por el Rebelado del Año). Unos cabrones se levantaron en armas en la selva lacandona (donde la vida es mas ca…), y Chiapas se convirtió en el foco del mundo. Primero querian que renunciara el Presidente (le quedaban escasos ocho meses para largarse, no podian haberse levantado antes?), luego que respeto a la comunidad indigena, que tierra y libertad, que libertad a los presos politicos…

Y como decia el que dijo: «y nadie hizo nada».

Hoy dia se les recuerda como un pasaje folklorico del mexico moderno, del paso hacia la democracia (si wey…), como la invasion de señoras con vestidos de colores chillantes, que luego se quedaron en la ciudad vendiendo muñequitas de trapo (dicen que hasta las barbies tienen servidumbre).

No me consideres, amable lector, un malinchista, ojete y antinacional…. Porque oJete si soy, lo demas no.

Consideralo como un berrinche de uno mas de los añadidos al conflicto, que creiamos que se estaba haciendo algo por cambiar el pais, que se puso su pasamontañas hecho de un calcetin negro y salio a la calle, de los que hicieron huelga fuera de gobernacion, uno de los que caminaban silenciosamente en las marchas del 2 de Octubre (no se olvida… pero ya vale madre), de los que caminaban la antiprosecion y colaboraban con la revista Zurda, cuando era una revista intelectual de izquierda, de los que leia la Jornada porque segun si decia la verdad y no mentia como el Excelsior o el Universal….

Al fin y al cabo… nada pasa, y nada ha pasado….