«Yo lo que quiero contribuir, es con estas preguntas y algunas conjeturas que estoy haciendo […] sobre la base de que es un intento de entender, para nada es la neta, dogma, ni mas valioso que otro porque supuestamente soy experto»
Manuel Gil Antón.
Y he platicado en el aula y con los amigos mi opinión sobre lo que pasa en el IPN y claro hay opiniones muy distintas y visiones diferentes, por supuesto que en mucho caso lo realizado no pasa de charla de café, pero si hay que hacerse algunas preguntas, por supuesto hay muchas que no me hago porque hay intereses que no me saltan, pero hay otras que me parece debo hacerme, comparto la entrevista de Gil, ya que toca temas que me interesan, para tenerla a la mano y para poder consultarla posteriormente, en todo caso como cualquier evento que esta sucediendo, todo puede cambiar de un día a otro.
Otro textito interesante que me encontré hoy para abonar a la conversación, de Octavio Rodríguez Araujo: http://www.jornada.unam.mx/2014/10/16/politica/023a1pol
Salú!
Me tome el permiso de cambiar por el vinculo directo al texto.
Es tu chante, son tus reglas. En realidad, yo me tomé el permiso de escribir ;-)
De primera mano algunas conjeturas de este señor se acercan a varias cosas que se han comprobado al interior, me ha dado pauta a explorar y preguntar por aquí y por allá otras ideas interesantes.
Pero me ha confirmado lo desvinculados que están las universidades públicas de lo que se supone que debería ser su quehacer (mismo que ignoran de sus leyes orgánicas y que esta plasmado su función de lo que fueron concebidas), inclusive el grado de alejamiento. Ahora entiendo «su» sorpresa de que ocurra un movimiento dentro de las estructuras del gobierno opresor. Me queda claro que la autonomía les lleva a pensar en aislarse, en centrarse en los problemas propios, la sorpresa es de «que malo que les ocurra» y no pensar en que nos ocurra.
Lo que no me agrada es como mete unas ideas que no eran la pregunta como lo de Ayotzinapan.