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La historia mas triste de este mundo jamás escrita anda rondando por una de esas esquinas en las que uno da vuelta ¿es la tuya? ¿O es la mía? que mas da, a nadie le importa.

No hay nada tan serio como para no reír.
Cuando la tierra se abra y me trague.
Cuando en el infierno me retuerza de dolor.
Cuando el castigo de todo lo que hice mal
llegue a rendirme cuentas.
Ahí estaré de frente y con la desesperación de no haber vivido como quise
Cuando llene mis pantalones de mierda,
de el miedo, de el coraje insoportable,
por no haber visto que la felicidad estaba frente mió.
No habrá nada que se pueda hacer.
Y SATAN se ría de mi pinche destino.
No habrá ya nada para cambiarlo.
Mientras, aguardo en este lugar
en espera del sismo final.
Cuando todo se acabe y nada quede en pie.
De pie o de rodillas, nada cambiara el resultado.