Café

Un día en el trabajo comienza con la taza de café que termina por alejar la mala noche donde solo se duerme tres horas máximo, calientas el agua y tomas un desabrido café de cuarta que fue para lo único que te alcanzo después de darte vida de nuevo rico el fin de semana, entonces a ponerle tus dos cucharadas de azúcar lo único que puede disimular ese sabor del café corriente cuando no tas que se acabo y solo queda el triste trasto ese con lo que aparenta ser algunas partículas de azúcar «¡¡¡Diablos maldito día del demonio!!!» solo queda endulzar ese café a como de lugar, hurgas en tu bolsillo y sacas el caramelo ese que te regalaron al pagar la cuenta del restaurante de comida japonesa es donde caes en cuenta que cuesta la vida de pseudos pudiente, te metes ala boca el caramelo y a tomar el café una mezcla de menta y café no sabe tan mal después de todo, el día esta salvado una vez mas ¿que pasara mañana? Como te las arreglaras si ya no tienes para los pasajes ya ni que decir para un cuarto de azúcar, es miércoles solo faltan otros dos días mas el fin de semana es día de pizza.

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