– ¿Sabes algo? esta parte de tu relato me fascina – dictaminaba Trini The Great -; Rodo tiene sueños de doncella y todo el ambiente que describes es como de torneo. Simplemente me parece genial.
– ¿Ah sí? – yo no recordaba haber hecho eso a propósito, es más, lo escribí así porque creí que se vería mejor y con mucha mayor verosimilitud.
– Realmente es bueno – Sandra, mi sacrosanta… bueno, dejémosla en mi jefa de departamento, acababa de leer el otro relato que había finalmente terminado al 100%- realmente está bien estructurado y todo encaja, el final es sorpresivo y en ningún momento lo vendiste.
-¿Ah, sí? -yo tenía la intención de ir dejando pequeños detalles que sirvieran de pistas para el lector atento; eso se lo aprendimos a sir Arthur Conan Doyle, que decía que un cuento de misterio bueno era aquel en el que el lector tendría a su disposición la suficiente información para resolver, él mismo, el caso que planteaba el libro sin la ayuda del detective. Quizá le pasaron desapercibidas, pero está bien, no «vendimos» el final. Eso es bueno.
-Señor, usted escribe muy bien – Trini The Great volvió a dictaminar.
-Oye… yo corrijo una revista del ITAM, allí publican cuentos de estudiantes, y no sólo estudiantes del ITAM. Tú eres del ITESM, no creo que te pongan muchas trabas, además… no creo que te haga ningún daño comenzar a publicar desde ya -Sandra, mi jefa de departamento, emitía una opinión, válida por una mano de barniz para mi maltrecho ego.
Pero…
-Necesito ver mejor tus cuentos, hay algunos elementos que discordan. También tienes algunos detallitos que alentan el ritmo del cuento. De todas formas tus relatos funcionan y sabes variarles la velocidad – Trini The Great dudaba un poco.
– Sí, tienes con que publicar, pero ellos piden que estén absolutamente… este… bueno, tienen que estar completamente limpios en su estilo… – por más que Sandra, nuestra Michiru que en lugar de tocar el violín manipula un lápiz rojo de corrector, trató de decirlo de la manera más cortés y educada que pudo, la idea de que me hace falta un mejor estilo me llegó.
Sip, un mejor estilo, y yo que soy corrector de estilo… aunque también debemos aclarar algo: No todos los correctores y editores escriben bien, de hecho son poquísimos; también se dice que un doctor no puede autorrecetarse o autodiagnosticarse, requiere de la ayuda de otro doctor para eso.
Al menos este par de pistolas está de acuerdo en algo… tenemos el ron (digo, el don), lo demás se pule, y se pulirá, cómo de que no.
Peace
RTM