Teniendo un chinguero de cosas que hacer, y poco tiempo decidimos de ultimo momento salir a pasear =), (notese nuestra preocupacion estudiantil :P), nuestros pasos nos han llevado a Viveros (no sin antes comprar 1/4 de cacahuates para las ardillas).
Bora ha estado contenta persiguiendo a las ardillas, les ha tomado cierto miedo. Cosa rara porque siendo mas bebe dejaba que los animalejos estos se le subieran y no habia miedo, ni nada.
Mientras la miraba correr, reirse y brincar, me acordaba de lo pequeña que era cuando nacio, de lo fragil que parecia. Aun sigue siendo fragil y pequeña, pero de un modo diferente.
Lo bueno es que aun me quedan como 10 años antes de que empiece con las loqueras de la adolescencia y ya no quiera ni dirigirme la palabra. Asi que mientras disfrutare de sus platicas, de la repasada de colores en ingles, de sus historias con Winnie Pooh… es gratificante ver como crecen los crios.
Despues de que la lluvia nos agarro a medio paseo, nos fuimos al mercado de Coyoacan a comer… fue un atasque digno de rey, jejeje. Ya de regreso pasamos a comprar queso y tostines a la tiendita esa de cositas importadas.
Berna, la encargada me ha dicho que si tienen del queso ese que quieres, asi que cuando vengas cuenta con el y con un delicioso vinito =)
A eso de las 8 hemos llegado a casa :P, cansados y contentos.
Bora y Victor duermen placidamente mientras yo, escribo esto que les comparto ahora.
