He estado leyendo los nuevos tópicos de este foro, y no me termina de agradar lo que alcanzo a entender.
Está demostrado que un otaku sin ego está indefenso
ante la vida, y eso es porque el otaku común no tiene
vida. Por eso es que muchos de nosotros nos refugiamos
en la absoluta subjetividad de nuestro propio criterio
(o falta del mismo) para sentir algo de seguridad. Siempre
ha sido así, pero en fechas últimas lo que he visto en los foros
ha sido una colección de «ayayay», «sufro-sufro-sufro»,
«me-duele-me-duele-me-duele» y «los-odio-los-odio-los-odio».
El caso más simpático para mí es el de los antifans de Jonathan
Kent. Personalmente no encuentro diferencia entre los posts de
este usuario y los de algunos de sus detractores, pero los últimos
acusan al primero de escribir puras pendejadas, como si ellos
fueran colaboradores de «Nexos», «Letras libres» o «Vuelta»,
como si sus posts estuvieran 100% libres de pendejadas, cuando
en algunos casos suele pasar lo contrario.
Por eso cada vez que alguien acusa de pendejo a JK, no
puedo evitar emitir una mueca de burla.
Otro caso simpático es el de Luis Edgar y Nightlord. No defenderé
a Nightlord por el hecho de que él sea un coterráneo
con un cotito de poder en este foro remarcablemente tapatío.
El chamaco opina de muchas cosas porque sabe de varias,
no es lo mismo opinar de «oidas» que porque uno mismo las
vio y las conoce. Eso siempre intimida y hay dos que tres
personas que no pueden tolerar eso, como el caso
de Luis Edgar. El muchacho en sí no me desagrada gratis,
pero siento que trata de demostrar algo… antiguamente
esa actitud en la Internet (gurpos usenet
y ML) acarreaba sinsabores, amarguras y soledad, pero
ya que esto de la güeb ya se democratizó, hay público
para todos.
Recuerdo un caso en el que Luis Edgar _piliaba_ con Nightlord
por algo, finalmente el primero solicitó la opinión del Yue,
conocido reporter del AP en Rancholandia, Japón, que
dijo lo mismo (con otras palabras) que Nightlord. Entonces el otro
muy pero muy digno, proclama: «¿Ves cómo tú no estabas en lo
correcto?».
Esta clase de discusiones bizantinas le dan sabor a los foros,
pero demasiado sabor embota el gusto y acaba dando nauseas.
Por eso es que he comparado a los otakus con los partidos de
izquierda (y ambos comparten el mismo buen gusto
para eso de la vestimenta), por eso en el Manifiesto de Ozuluama
escribí que «lo que no quiero que pase es que el club se convierta
en una asamblea en la que se hable en asambleés o en un grupo
que rinda culto a la personalidad del líder o peor aún, en
un grupo de activismo que haga proselitismo…» porque vi que
eso le pasó a muchos grupos y los resultados fueron nefastos.
Como sea, muchos de los asiduos a estos foros se han
convertido en unas quejumbrosas jotitas sin calzones.
Personalmente no me afecta ese hecho, es más, mejor
para mí, sirve que dispondré de más material para discutir
un proyecto que tenemos con el Genma.
No es gratuito que estar aquí me haga sentir como esa
rata que salía en aquella película animada llamada «La telaraña de
Carlota», que se daba unos festines nocturnos en la feria del
pueblo con toda la comida que tiraban los visitantes.
Podría ser que toda esta basura me llegue a dar de comer.
Saludos
RTM Mostrenco