* Odian frases como «en base a», «pero, mas sin embargo», «pero no obstante», y similares.
* Escriben los más apropiadamente posible, incluso en el MSN.
Creen que «casi» cualquier idiota escribe en periódicos.
* Usan palabras «raras» en sus conversaciones cotidianas como «poder adquisitivo», «hegemonía», «disfunción narcotizante», «enajenación», «opinión pública» o «connotación».
* Lo mismo han leído a Levi Strauss que el «Libro Vaquero». Pero, este último sólo para realizar análisis lingüísticos y semióticos.
* Juegan «adivínalo con mímica», «basta», «scrabble», «ajedrez» y «maratón» en sus reuniones (Honestamente, ¿hay alguien que todavía juegue Maratón? Por cierto la laguna que está cerca de Tampico es la laguna del Chairel).
* Saben que el amor es sólo un estado de ánimo.
* Odian los clichés.
Ven cine de arte y películas «extrañas», desconocidas para la mayoría.
* Hablan todo el tiempo de sujetos como Gramsci, Chomsky, Habermas, Barthes, Cioran