Bueno, mis planes siguen progresando, me da gusto, sólo que…

 

Allí
andan invirtiendo en la mano de obra para que a la hora de que nos
quieran ofrecer más en otro lado lo pensemos. «No, si han sido tan
buenos conmigo, han invertido en mi desarrollo, wara wara wara».

 

Pamplinas.

 

Me
he enterado de que encabezo el standing de productividad de mi turno,
nada mal considerando que hay gente que lleva mucho más tiempo que yo,
que apenas va a la mitad de lo que yo hago al día. Lo más sorprendente
es que además lo hago bien.

 

Pero bueno, tenía
planeado al terminar la capacitación salir de vacaciones e
inmediatamente pedir un ascenso debido a que mi coordinadora se
encuentra en estado interesante.

 

Pero… creo que mejor no.

 

He
oído a mi coordinadora y a la persona que nos capacita quejarse
amargamente de la situación de la empresa. Somos mano de obra muy
capacitada cuyas labores tienen una curva de aprendizaje de casi el 40%
(creo que es menor) y estoy seguro que un diablero en La Merced está
mejor cuidado y más contento que nosotros.

 

Veo de hecho a
mis colegas y a mis superiores, yo siempre pensé que así se llevaban
por la presión, pero bien vistas las cosas creo que no es tanto la
presión, veo el desánimo flotando en la empresa y he llegado a algunas
conclusiones.

 

Mis colegas no están concientes del valor
que poseen, ¿qué no darían ciertas empresas líderes por tener a alguno
de nosotros para resolverles el desmadrito? ¿Qué serían capaces de dar
por tener nada más a uno? Pues bien, la gente no sabe de eso y se
comporta como si realmente la compañía nos estuviera haciendo un favor
al ocuparnos y salvarnos del ejército industrial de reserva.

 

Por
eso es que mejor me la tomaré con tranquilidad, planeo hacer lo que
tenía planeado, echarle todos los kilitos a la capacitación, que ahora
será ya mi máxima prioridad, terminarla, pedir vacaciones y para
navidad ya veré qué ocurre.

 

O quizás antes, había dicho
hace poco que así como cualquier banda de rock puede en un momento dado
ser la mejor banda de rock del mundo, así también cualquiera puede
ganar un concurso.

 

Mi beta reader me ha dicho que en
realidad ya soy bueno, que en realidad sólo requiero que un tercero lo
reconozca para beneplácito de la fanaticada.

 

Veo mi texto y luego veo los textos ganadores de años pasados y me pregunto si realmente será…

 

Y
también hay veces en los que me digo… Carajo, tantas ideas que tengo
que no me atrevo a poner aquí porque no soy Anónimo. Mi cara y mi nick
ya son identificables. Soy alcanzable siempre para posibles represalias.

 

Así
que en lo sucesivo este blog será usado más que otra cosa como »El
Diario Oficial de la Federación», se publicará acá cosas que desee dar
conocer a la comunidad.

 

Lo que realmente pienso irá a dar
a otro lado y por supuesto haré el experrrimento de ver si ese lado
flota como una botella en el mar o de plano no puedo mantenerme lejos
de los apuros.

 

Pero quién me lo manda ser así de culebra y ojeis.

 

En fin, esto no me matará.

Saludos.