siendo uno de los pocos países del mundo que reciben más inmigrantes.
- Por más de doscientos años, la economía estadounidense
ha sido fuerte y ha generado millones de empleos, con niveles crecientes de ingreso real. Además, durante más de un siglo, el ingreso percápita ha sido muchas veces mayor que el de el resto de la población mundial. Esta fortaleza y gran estabilidad ha atraido la afluencia de capital e inmigración del extranjero.
Lo anterior ha generado una preocupación nacional por las consecuencias sociales, políticas y económcas de la migración. Los indocumentdos trabajan, ahorran, pagan impuestos y consumen servicios públicos; sin embargo, existe la preocupación de que su influjo reduzca las oportunidades de empleo y de salarios de algunos grupos de trabajadores nacionales, y que incrementen el consumo de servicios públicos, incluso aquellos que no están legalmente autorizados para disfrutar
III ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA EMIGRACIÓN MEXICANA HACIA
LOS ESTADOS UNIDOS
a ) Principales causas externas de la migración
El reclutamiento de trabajadores mexicanos empezó a fines del siglo pasado, se incrementó durante la primera Guerra
Mundial y toda la década de los veintes, después hubo una baja y se volvió a incrementar durante la segunda Guerra Mundial.
Una de las causas que dieron origen a la emigración mexicana hacia los Estados Unidos fue el caso de algunos grupos mexicanos residentes en la frontera quienes pasaron a formar parte de los Estados Unidos. Esto ocurrió por medio de rebelión (en Texas), después de una guerra entre México y Estados Unidos (Texas y Nuevo México), y por adquisición (Arizona y Nuevo México). En el período transcurrido entre la batalla de San Jacinto en 1836 y la compra Gadsden en 1853, Estados Unidos adquirió los actuales estados de Texas y Nuevo México y parte de Colorado, Arizona, Utah, Nevada y California.1
La población mexicana en los Estados Unidos de Norteamérica
se ha ido conformando a partir de este núcleo inicial, que
habitaba los territorios incorporados, y de los emigrantes provenientes de México, que en distintos períodos han venido
estableciéndose como ciudadanos norteamericanos.
Esto asentó las bases de la migración mexicana en mayor escala en el siglo XX. En este siglo, esta frontera ha influido profundamente en la vida de los mexicanos, la cercanía y el fácil acceso a Estados Unidos hizo que una gran cantidad de emigrantes presionara constante y amenazadoramente sobre los logros económicos de los mexicanos ya radicados en este país.
Junto a lo anterior, la caótica condición de las zonas
fronterizas, impidió todo control gubernamental de los
movimientos de población entre los dos países, el control formal de este tráfico humano se inició en 1886, no fue sino hasta 1907 cuando se estableció una forma definitiva de control. En 1919 únicamente 151 inspectores vigilaban toda la frontera.
Antes de 1910 es estadísticamente imposible analizar a los inmigrantes mexicanos. Sabemos que después de 1848, tuvo lugar un importante movimiento, al tomar parte miles de mexicanos en la fiebre del oro de California.
Durante los años 1907 y 1908, los ferrocarriles mexicanos unieron el interior de México con las ciudades fronterizas. En esta forma se facilitó mucho la migración. Uno de los primeros estudios sobre este tema fue el realizado por el Dr. Manuel
Gamio en 1926-1927, a petición del Social Research Counsil.
Para Gamio la inmigración a los Estados Unidos es
fundamentalmente un fenómeno económico, resultado lógico de un aumento de la demanda de trabajo de un país y una reserva disponible de trabajadores en el otro.
Con gran precisión establece las causas determinantes que
llevan a los mexicanos a emigrar: Las malas condiciones de vida, los bajos salarios y el desempleo en México.
Casi todos los inmigrantes eran trabajadores agrícolas y peones endeudados, según la costumbre que todavía prevalecía en México y obligaba a la gente a permanecer en el país. Fue durante la Revolución, después del año de 1910, al abolirse este sistema, cuando se inició un sustancial movimiento de personas hacia los Estados Unidos.
De 1910 a 1919, aumentó en los estados fronterizos la necesidad de mano de obra. Se había excluido a los chinos en 1882 y a los Japoneses en 1907, y al principiar la primera guerra mundial disminuyó la entrada de migrantes europeos a los Estados Unidos.
- Efectos de la primera Guerra Mundial sobre el movimiento
migratorio
La Primera Guerra Mundial aumentó la demanda y los precios de productos agrícolas y mineros, provenientes de los estados fronterizos. En 1917 se promulgaron varios reglamentos para permitir la entrada temporal a trabajadores agrícolas, trabajadores de mantenimiento de vías o caminos y mineros. Sin embargo en 1919, un informe mostró que las dos terceras partes de estos obreros permanecieron en el país.
Esta primera ola de migración efectuada de 1910 a 1920 fue únicamente el principio; la siguiente década vió la llegada de migrantes mexicanos en grandes números.
- Efectos de la Depresión y Medidas Anti-inmigrantes
A los años florecientes de la economía estadounidense siguió otros muy distintos: Sobrevienen los años angustiosos de la depresión. Los primeros en sentir los rigores del desempleo y la miseria fueron sin duda las grandes masas de desempleados
pertenecientes a las minorías raciales y nacionales, doblemente explotadas por el sistema. Millones de negros, puertorriqueños y mexicanos se encuentran ante el problema de sobrevivir en un
país racista. Para los mexicanos, la solución no se hace
esperar. El Gobierno de los Estados Unidos pensó que la mejor manera de ayudar a los desocupados mexicanos, era deshaciéndose de ellos, se inicia entonces la famosa "Operación Deportación". Emigrantes legales e ilegales, trabajadores temporales, residentes permanentes y ciudadanos norteamericanos de origen mexicano, fueron expulsados del país como vulgares delincuentes. A muchos se les aplicó un nuevo método para forzar la salida voluntaria: Se les suspendían los pagos de ayuda gubernamental y obligados por el hambre, salían hacia México.
Unos años más tarde, las emergencias debidas a la escasez de mano de obra durante los primeros años de la segunda guerra mundial, hicieron que los mexicanos fueran nuevamente bienvenidos. Subió la emigración ligeramente pero en forma contínua, y de nuevo se empezó activamente a reclutar trabajadores, esta vez por medio del famoso programa de trabajo bajo contrato (Contract Labor), denominado de Braceros.
Durante algún tiempo después de la guerra, se suspendieron estas actividades, pero los empresarios agrícolas, lograron reunir fuertes argumentos para reanudar el programa de
braceros, esta vez bajo el pretexto de la Guerra de Corea.
Para el trabajador mexicano, las formalidades requeridas para conseguir entrada legal eran caras e inciertas; en muchos casos penetrar ilegalmente era más rápido y barato. A los agricultores, les convenía contratar a los ilegales porque en esta forma, se ahorraban mucho trabajo administrativo y honorarios altos. El programa de braceros terminó a finales de 1964.2
b) Principales Causas Internas
- Desempleo
Por otra parte, la problemática del empleo -empleo productivo que permita satisfacer las necesidades básicas de la vida moderna-, no es exclusiva del sector agropecuario sino que afecta a la totalidad de la economía. El sector industrial no ofrece oportunidades de empleo suficientes para los requerimientos de la población (fuerza de trabajo), situación que parte del sector agrícola o de los sectores con tecnología atrasada.
El aparato productivo, se ve altamente restringido en su capacidad de empleador, dada la estructura de una demanda fuertemente concentrada y dadas las tecnologías que se utilizan para satisfacerla.
Esta sub-utilización de fuerza de trabajo, tanto en el ámbito rural como en el urbano, es donde se debe buscar la
presión más esencial y última de emigrar a Estados Unidos. El
modelo de desarrollo seguido por México ha tenido como objetivo el crecimiento y la modernización, en el supuesto de que ello sería la solución de otros problemas.
Este proceso se ha visto dominado principalmente por patrones de sociedades avanzadas e industrializadas y por el uso de tecnologías desarrolladas gracias al gran capital de éstos. Por lo que estas estructuras de consumo y de producción conducen a una situación generalizada de desequilibrio a nivel de factores productivos que se traduce en una sub-utilización de la fuerza de trabajo. Son estas las condiciones que conducen a la salida de mexicanos al exterior. La migración es vista así
como resultante final y lógico de la problemática del empleo derivada del proceso mismo de desarrollo del país.
El problema básico del fenómeno migratorio contemporáneo radica en que mientras existen fuerzas internas y del sistema internacional, que inducen a emigrar de la periferia a los centros del sistema, las puertas se están cerrando y no hay a donde ir. La Europa del siglo XIX e inicios del XX fue una gran expulsora de población conforme la Revolución Industrial extendía su influencia y terminaba por afianzarse en su camino
del Norte hacia el Sur y del Oeste hacia el Este.
El continente americano fue la principal región de destino, de millones de europeos. Ciertamente el mundo de fines del siglo XX no es el mismo que el de fines del siglo XIX. El punto que se quiere destacar es que se tiende a olvidar que la emigración esta asociada directa o indirectamente, al conjunto de procesos y flujos que se han dado con la expansión del sistema capitalista internacional y al sostenimiento de una posición restrictiva en cuanto a la movilidad de la fuerza de trabajo y una libertad irrestricta para el capital y las mercancías.
Las explicaciones más generalizadas y difundidas de la migración de mexicanos a Estados Unidos en lo que a las condiciones de México se refiere, suelen asociar este fenómeno a las realidades y circunstancias del México rural y agrario o
bien a aquellos aspectos que hablan de un México
tradicionalmente atrasado o no desarrollado. Sin embargo existen nuevas propuestas, como la de que el éxodo actual de mexicanos al país vecino se contempla ligado al proceso de desarrollo del país. La liberación del peón de los lazos que lo retenían en las haciendas se inició con la revolución de 1910 y se continuó con las acciones de reparto agrario que siguieron y fueron definitivas durante el régimen Cardenista. Lo que surgió de estas nuevas condiciones dió como resultado movilidad e incorporación de la mano de obra rural, a un mercado nacional de fuerza de trabajo. Sobre este fondo la presión demográfica, la incorporación al mercado y sus efectos se consideran elementos que proletarizaron y marginaron al
subempleo a amplios segmentos de la población rural.
La estrategia de modernización que se implementó en México después de la Segunda Guerra Mundial desarraigó a una parte importante de la población del país y las separó de los medios tradicionales para satisfacer sus necesidades básicas, sin proporcionarle a la vez los mecanismos institucionales para garantizar por lo menos un mínimo de seguridad económica dentro del nuevo orden.
lV FACTORES ECONOMICOS QUE FAVORECEN EL MOVIMIENTO
MIGRATORIO.
La migración representa un ajuste a las desigualdades en la distribución de la tierra, trabajo y capital que surgen del desarrollo económico. El proceso de privatización y mecanización desplaza trabajadores rurales de la agricultura, mientras que la capitalización desplaza a grupos de
trabajadores urbanos en las fábricas, generando subempleo y desempleo, y orillándolos hacia la migración internacional.
La migración se deriva de la segmentación económica, la cual crea una clase de trabajos eventuales y de poca paga con oportunidades limitadas para progresar. Los empresarios
recurren a los trabajadores foráneos debido a que a los nativos no les agrada hacerlos, y esto da origen a flujos migratorios, mediante la contratación de mano de obra migrante. La migración representa un ajuste a las desigualdades en la distribución de la tierra, trabajo y capital que surgen del desarrollo económico del país de origen.
- En Estados Unidos
La altas metas de producción y mano de obra de Estados Unidos propician en el trabajador mexicano la inquietud de emigrar para buscar mejores fuentes de empleo, que no
encuentra en su país.
La probabilidad de que Estados Unidos llegase a una economía
que se midiera en miles de millones de dólares, no sería cosa realmente fantástica; ese nivel ya se ha visto en casi toda su historia económica.
Ese elevado nivel de consumo en la producción industrial, debe traer consigo, no solo dólares, sino una vida nacional mejor en todos los órdenes y entre todos los grupos de la economía, lo cual incluye al empleado mexicano, que también sale con una ganancia, ya que el salario que se les ofrecería sería menor que el de los estadounidenses pero mayor al del planteado por el gobierno mexicano.
Asímismo esta mejor vida nacional de los Estados Unidos sería atrayente, ya que el inmigrante contaría con mejores lugares para su supervivencia. En Estados Unidos, como en todos los países también hay crisis; en 1974 se da una de sus más fuertes crisis, es cuando el país tiene una gran disminución de la inversión, baja producción, su población económicamente activa se encuentra en paro total.
Para su economía capitalista, lo más dramático es la caída de la tasa de ganancia, que da origen al estancamiento económico. En estos pocos casos es cuando el mexicano, tiene necesidad de regresar a su patria a reponerse de esta crisis, no ganando lo mismo como lo hacía allá, pero tratando de sobrevivir.
Los indocumentados mexicanos contribuyen al incremento del PIB de Estados Unidos, no sólo con la creación de Bienes y Servicios, sino también con los gastos de unas dos terceras partes de sus salatios; el valor agregado por el trabajador indocumentado al PIB de Estados Unidos no ha sido estimado, pero se calcula que es de varios billones de dólares.
-
En México
Existieron factores que contribuyeron al aumento sin
precedentes de los precios internos, como el cambio experimentado en los salarios nominales.
Las causas de variación de la base monetaria han resultado primordialmente de la forma de endeudamiento público y de una política de mantener reservas internacionales. Es importante señalar que la economía mexicana había experimentado un notable equilibrio dinámico, durante un período considerablemente largo, ya que las principales variables de comportamiento de la economía crecían.
En un contexto de la crisis actual, se ha iniciado en México un proceso de contracción en el sector paraestatal, en parte tiende a traducirse en privatización.3
Las empresas se vuelven privadas, por lo tanto requieren de un personal capacitado, en su gran mayoría gente extranjera, a la cual se les ofrece los mejores puestos y el doble del salario que se le da al empleado mexicano, esto conlleva a una situación, donde el trabajo del mexicano en su país no es bien reconocido y remunerado; es cuando, optan por irse a los Estados Unidos a trabajar en otra área, mejor remunerado que en su propio país.
México y su población se ven, en una relación de dependencia a los Estados Unidos. Un esfuerzo extraordinario de millones de trabajadores mexicanos se ha traducido, junto con la renta petrolera, en una enorme transferencia de recursos al exterior, y en una disminución relativa de las inversiones productivas
internas.
Por otro lado la crisis, produce un conjunto de coacciones* que obliga a la intervención publica a buscar la recomposición del sector industrial, mediante el recurso creciente a las fuentes externas de financiamiento.
Otro factor de importancia, es la devaluación monetaria, porque al devaluarse nuestra moneda, el trabajador mexicano busca irse a los Estados Unidos y cobrar en dólares, que al convertirlos en moneda nacional se eleva su poder adquisitivo.
Así, la economía mexicana tendrá ciertos aspectos desfavorables tales como: la estructura monopolista de la economía, la presencia del quizá más fuerte sector capitalista de Estado en toda América Latina; una estructura agraria que conlleva a dispariedades en el ingreso y la riqueza entre la población rural; ciudades llenas de vastas masas de
desocupados y sub-ocupados, y por último, pero no de menor importancia, unas intensas relaciones económicas con Estados Unidos en las cuales, este último ejerce predominio.
Aunque el flujo de mano de obra hacia el norte es el principal factor del programa fronterizo, existen otros elementos importantes, como: el flujo de los salarios de los trabajadores mexicanos en las tiendas del lado estadounidense de la frontera; la mayor dependencia de este comercio al menudeo con relación a las compras de un mercado mexicano cada vez más amplio, el flujo de la producción agrícola de los estados fronterizos mexicanos hacia los Estados Unidos, la contribución de los dólares a la economía comercial, la directa dependencia tecnológica con respecto a la norteamericana y una multitud de empresas y actividades ilegales.
V CONSECUENCIAS DEL MOVIMIENTO MIGRATORIO EN LA ECONOMIA
NORTEAMERICANA Y NACIONAL
a) Consecuencias Económicas en México
El movimiento migratorio a Estados Unidos afecta la vida de las comunidades mexicanas, por una parte, la gran cantidad de dólares que se envían a los pueblos y comunidades mexicanas, y por la otra, la ausencia de mano productiva en la familia, es lo que deja huella inevitable en los patrones de organización social y económica.
En la medida de su capacidad, los emigrantes compran tierras de cultivo, aunque en muchas ocasiones permanezcan baldías, solo se conservan como patrimonio hasta el regreso del
emigrante. Como resultado de ese proceso hay estudios que reportan una disminución en la producción agrícola y un extrangulamiento de la actividad económica local a la
emigración internacional.
No se puede establecer con precisión la cantidad de ingresos enviados de Estados Unidos y la manera en que éstos se emplean. El dinero llega en cantidades irregulares, viene en giros postales, cheques de viajero, cheques de caja, cheques personales, órdenes de pago, dinero en efectivo enviado con parientes o amigos, y tal vez ahorros que trae el mismo emigrante.
El dinero que se recibe de los emigrantes de Estados Unidos es usado para el consumo familiar, en algunas ocasiones para invertir en negocios o abrir una cuenta de ahorros. De hecho
la entrada de dólares ha sido un factor determinante en algunos municipios de la República, ya que se han abierto sucursales para atender la demanda de estos servicios.
Según estudios realizados concluimos que la propiedad de una casa es la aspiración universal entre las familias de las comunidades, y que se emplea la emigración como un medio para lograr este fin. Solamente algunos exitosos emigrantes han podido pagar los elevados costos por terrenos o casas habitación; y esto los pone por encima del común de la comunidad a la que no le es posible adquirir estos bienes.
La emigración tiene una relación muy compleja con los factores que influyen en la productividad agrícola. El
incremento en la emigración se asocia con el decremento de la obligación que tienen los miembros de la familia hacia las tareas agrícolas, pero también con el uso de otros mecanismos tales como el trabajo asalariado, maquinaria y semillas
mejoradas.
En general, el incremento en la emigración tiene un efecto nulo o positivo sobre la productividad agrícola. La única excepción a esto es en Altamira. Allí las familias no emigrantes producen un promedio menor que las emigantes.
Una gran cantidad de individuos que han podido hacerse de propiedades, de una casa, o que han podido hacer mejoras a la que ya tienen ha sido a través de la emigración, también es claro ver los efectos que ha tenido la emigración en la distribución de la vivienda entre los emigrantes y los noemigrantes en cada unidad. En la mayoría de los casos los emigrantes tienen mejores casas habitación que los no-
emigrantes.
Los patrones socio-económicos comunes reflejan
inevitablemente un proceso histórico de desarrollo económico y cambio social amplio, ya que la emigración no siempre desempeñó el papel que tiene hoy en día. Durante las tres primeras décadas del siglo, la emigración internacional se practicó por pequeños grupos de jóvenes, quienes podían afrontar el viaje, por lo que tuvo menor impacto en las comunidades.
Durante el programa Bracero y del Reparto Agrario, la emigración comenzó a desempeñar un papel más dinámico en el desarrollo económico, ya que la salida de braceros brindó a los nuevos ejidatarios la forma de adquirir los fondos necesarios para el cultivo.
Durante los años setenta, la emigración se combina con los inicios de la modernización agrícola. La maquinaria y los nuevos productos desplazados a los campesinos, cambió la organización del comercio y la manufactura en las grandes áreas urbanas, desplazó a los trabajadores de las industrias
tradicionales y se agotaron las oportunidades comerciales a nivel local; mientras la modernización de las fábricas redujo las oportunidades de empleo en las áreas urbanas. La
emigración internacional adquirió mayor importancia como estrategia de sobrevivencia, permitiendo así a las familias ajustarse a las transformaciones estructurales de la sociedad mexicana.
En contraste con la opinión predominante sobre los efectos económicos de la emigración, es claro que las ganancias obtenidas en Estados Unidos desempeñan un papel significativo en la formación y operación de pequeños negocios en las zonas urbanas. Entre el 9 y el 16% de los negocios en las
comunidades, fueron capitalizadas con dinero estadounidense;
entre el 27 y el 50%, eran propiedad de emigrantes. Los negocios fundados por emigrantes proporcionan empleo a un número modesto de sus familias; unos pocos contratan empleados; ambos grupos componen un total de entre el 6 y el 12% de la fuerza laboral activa, lo justo para equilibrar la ausencia anual de trabajadores, pérdida por la emigración a Estados Unidos.
La emigración tiene dos efectos contrarios en la producción agrícola. Si se incrementa la emigración de la familia, disminuyen sus relaciones con el cultivo; pero también aumenta el nivel de producción entre los que continúan en la actividad agrícola. El aumento en la emigración disminuye el número de trabajadores de una familia que se dedica a la agricultura, pero aumenta el uso de mano de obra contratada, maquinaria e implementos modernos. En consecuencia, las familias de
emigrantes que se relacionan con los cultivos, producen más que las familias de los no-emigrantes. De cualquier modo producen mayores cosechas y venden un porcentaje más alto de sus productos al mercado.
Asi, mientras que la emigración se origina en
transformaciones profundas de la sociedad agraria involucrando procesos de mecanización, capitalización y comercialización; con el tiempo produce cambios socio-económicos, que alientan estas tendencias y propician una migración subsecuente.
Durante la transformación de la agricultura en 1960, los trabajadores fueron desplazados, habiéndose dado un libre acceso a Estados Unidos a través de las redes de relaciones conformadas durante la época del bracerismo, muchos trabajadores desplazados consideraron la emigración
internacional como un ajuste estratégico.
Dada la forma de operar de las redes sociales y la atracción ejercida por salarios altos, algunas unidades domésticas, de manera inevitable, emplearon estrategias recurrentes o establecidas. Conforme crecía la emigración, muchas familias pudieron invertir en métodos de producción agrícola de capital intensivo, y mientras más aumentaba la emigración recurrente, más familias se alejaron del cultivo. De esta manera la emigración agravó la baja demanda de trabajo agrícola y aceleró el cambio a la agricultura comercial. Entre tanto, el ejemplo de los emigrantes exitosos con viviendas bien construidas y llenas de comodidades modernas, motivó a otros a pensar en la alternativa migracional.
En resumen, la emigración hacia Estados Unidos representa una fuente socio-económica sustancial para las familias mexicanas. Un emigrante común que trabaja una temporada en aquel país, gana entre 4,000 y 5,000 dólares, que al
convertirlos a pesos resulta una suma considerable
Mejorando los patrones del crecimiento económico de México, el flujo migratorio se reduciría automáticamente. El factor más importante que determina la emigración de trabajadores mexicanos, es el bajo desarrollo de ciertos sectores de la economía nacional; la solución a este problema estaría basado en los esfuerzos que realizara el Gobierno mexicano para mejorar las condiciones económicas de la nación.
b) Condiciones Económicas en E.U.A.
En los últimos años la inmigración legal en los Estados Unidos ha sido de unas 550,000 personas, nivel significativamente menor que los anteriores en el siglo XX. La
afluencia legal en años recientes ha sido inferior a un cuarto de punto porcentual de la población cada año, o sea, casi la mitad del promedio histórico. En 1980, la población total estadounidense de personas nacidas en otros países, era de 14.1
Millones, lo cual representa el 6.2% de la población total del país.
Los extranjeros que entran legalmente a los Estados Unidos, pueden clasificarse en dos amplias categorías:
a) Inmigrantes
b) No-Inmigrantes
Los inmigrantes son aceptados como residentes permanentes y pueden llegar a adquirir la ciudadanía estadounidense. La
admisión de inmigrantnes divide a éstos en tres clases:
a) Los numéricamente restringidos, cuyo estado preferente se
basa en una relación familiar o en un posible empleo, quedando obligado el inmigrante potencial a demostrar que no será "una carga pública ".
b) Los numéricamente no restringidos (Principalmente
parientes inmediatos de ciudadanos estadounidenses)
c) Los refugiados y asilados.
A los no inmigrantes se les acepta en forma temporal y con un propósito específico, que casi siempre es un viaje de placer o de negocios. Además muchos extranjeros están ilegalmente en
los Estados Unidos, ya sea como migrantes o indocumentados que entran sin permiso al país, o como migrantes temporales que violan las condiciones de su visa de no-inmigrante al prolongar su visita o aceptar un empleo.
c) Efectos de la Inmigración sobre la producción y el ingreso
Los principios mercantiles indican que la inmigración en una economía competitiva eleva y mejora la producción. El aumento de oferta de trabajadores inmigrantes, incrementa la producción y las ganancias de otros factores de la misma en el país que
los recibe. La inmigración proporciona mayores ganancias a gran variedad de gastos: capital, tierra y trabajadores con destrezas diferentes a la de los inmigrantes. Los insumos a la producción pueden ser más efectivos cuando se cuenta con mayor cantidad de mano de obra.
Pese a que los trabajadores inmigrantes incrementan la producción, su adición a la oferta de trabajo puede modificar la distribución del ingreso. Siempre que la oferta de trabajo aumenta, los índices salariales se cotizan más bajos en el mercado directamente afectado. Aún cuando el empleo total de ese mercado aumento, algunos trabajajdores que estaban
empleados con la tarifa salarial más alta previa a la
inmigración, pueden no aceptar trabajar con un menor salario, así pues, es posible que los trabajadores nacionales que compiten con los inmigrantes por las plazas, sufran reducciones en su ingreso o su empleo.
Es frecuente que quienes se preocupan por el desplazamiento de empleos provocados por la emigración se concentren únicamente en este efecto inicial. Pese a todo, es probable que aumenten las oportunidades de empleo en los mercados laborales, donde la mano de obra inmigrante complementa a la nacional. Este incremento elevará los índices salariales y de empleo para los trabajadores nacidos en el país, incluso para los que fueron despazados de sus empleos en otros sectores. La demanda de mano de obra también aumentará porque la
disponibilidad de trabajadores inmigrantes alienta la inversión
en industrias, que en otras condiciones no serían competitivas, además la mayor demanda de bienes y servicios, resultante de las compras de los inmigrantes para su consumo, tiende a incrementar el empleo en el país. En consecuencia, el efecto neto del aumento de la oferta laboral provocado por la inmigración es la elevación del ingreso global de la población nacida en el país.
Los beneficios económicos de la inmigración se propagan por toda la economía, entre ellos se incluyen mayores oportunidades de empleo y salarios más altos para algunos trabajadores, así como las muy difundidas ventajas de tener productos a precios más bajos y mayores ganancias económicas. En cambio, la pérdida de empleos o las reducciones salariales que pueden producirse a causa de la inmigración, son más notorias que las ganancias económicas. Es probable que estas pérdidas se concentren en los grupos que compiten directamente con la mano de obra inmigrante.
Algunos han dicho que el desplazamiento en el mercado laboral puede ser muy grande, esta opinión supone
implícitamente que el número de empleos es fijo, y que si los inmigrantes encuentran trabajo quedarán menos empleos para los ciudadanos estadounidenses.
Sin embargo, es probable que los estudios enfocados en ocupaciones específicas de baja capacitación o en pequeños segmentos del mercado laboral, exageren los efectos del
desplazamiento al pasar por alto la movilidad en los empleos y las ocupaciones. Los estadounidenses de nacimiento que
trabajan en un sector pueden optar por otro tipo de actividad. Esto parece confirmarse en estudios más sistemáticos de los efectos de la inmigración sobre el mercado laboral. En los
estudios donde se adopta una visión más amplia de este, no se han enconttrado pruebas apreciables de desempleo entre los trabajadores nacidos en el país, atribuible a la inmigración. Los defectos directos de la inmigración sobre el empleo
nacional han sido demasiado pequeños para ser medidos, o se han disipado con rapidez a causa de la movilidad de los
trabajadores. Además, varios estudios han mostrado que la presencia de inmigrantes en los mercados laborales, guardan relación con un aumento de oportunidades globales de empleo, incluso para los grupos nacidos en el país, pertenecientes a minorías
d) Absorción de Extranjeros por el mercado laboral
Al principio, los inmigrantes están en desventaja en el mercado laboral de los Estados Unidos, porque muchos de ellos no hablan inglés, no están familiarizados con las costumbres e instituciones nacionales y no han sido educados ni capacitados para trabajar en el país. Sin embargo, conforme invierten en su educación y adquieren habilidades puede esperarse que sus experiencias y ganancias en el mercado laboral se asemejen a las de los nacidos en Estados Unidos.
Aún cuando el éxito de los grupos de inmigrantes en el mercado laboral depende de sus habilidades y otras características, la evidencia sugiere que a los trabajadores inmigrantes los absorbe con prontitud dicho mercado. Una dimensión del ajuste de los inmigrantes al mercado laboral es su pauta de empleo durante el año. Se ha calculado que en promedio, los nacidos en el extranjero se ponen a la par de los nacionales en semanas trabajadas, al cabo de cinco años; después, ya no se observan diferencias.
Informes de la oficina de censos de Estados Unidos y de otras fuentes muestran que, aunque inicialmente los nacidos en el extranjero ganan menos que los nacionales, sus ingresos aumentan, igual que en el caso de estos últimos, cuando adquieren más educación y experiencia dentro del mercado laboral de los Estados Unidos. Algunos resultados sugieren que después de diez o veinte años los varones extranjeros igualan e incluso llegan a superar a los nacionales con características similares en lo referente a ingresos. De aquí se infiere que las desventajas de venir del extranjero disminuyen y que los efectos favorables de la autoselección y la motivación persisten.
e) Efectos Fiscales de la Migracion.
Una preocupación importante, acerca de la inmigración, se refiere a la utilización de servicios públicos, como la educación y la ayuda a personas de bajos ingresos, de origen extranjero. Si el importe de los servicios que utilizan los inmigrantes internacionales es mayor que los impuestos que pagan, aquellos se convierten en una carga fiscal para los estadounidenses. No obstante, si dichos pagos superan el costo de los servicios, los inmigrantes constituyen una ganancia fiscal neta para el país.
Como en el caso de los estadounidenses nativos, el uso de servicios públicos por el inmigrante y su capacidad para pagarlos através de impuestos, dependen de sus características personales y familiares y, en grado determinante, de su éxito en el mercado laboral. Cuando los inmigrantes envejecen, y sus hijos alcanzan la madurez, se vuelven más dependientes de las prestaciones de jubilación que ofrece el Gobierno, pero esto se compensa con el ingreso de sus hijos al mercado laboral.
Se sabe poco sobre el uso de servicios gubernamentales por los inmigrantes; Sin embargo, los indicios disponibles inducen a pensar que no usan intensamente dichos servicios. En general, parece que los inmigrantes pagan sus propios gastos desde el punto de vista de la finanzas públicas. En su mayoría, llegan con el propósito de trabajar, y las prestaciones del gobierno no parecen atraerlos particularmente.
La inmigración puede provocar también transtornos fiscales en otros trabajadores. Por ejemplo, los que encaran una competencia más intensa en el mercado laboral pueden ver reducidos sus ingresos anuales y, por consiguiente, puede incrementarse su dependencia de los programas de beneficencia del gobierno. Si bien es cierto que algunos trabajadores pueden resultar perjudicados, la magnitud del desplazamiento parece ser pequeña.
- Un efecto favorable.
Durante gran parte de la historia de los Estados Unidos, la política de inmigración, se ha basado en la premisa de que los inmigrantes influyen favorablemente en el nivel general de vida y en el desarrollo económico. El análisis de los efectos de las migraciones recientes confirma esta premisa. Aún cuando en los últimos años ha entrado al país un número creciente de inmigrantes, incluso muchos ilegales, la inmigración todavía es baja en relación con la población y con el crecimiento de la fuerza de trabajo en los Estados Unidos.
A los inmigrantes los absorbe prontamente el mercado laboral. Aún cuando puede haber cierto desplazamiento, parece que esos inmigrantes no han desplazado a los nacionales de sus empleos ni han reducido los niveles salariales en una escala
amplia. Hay indicios más bien, de que la inmigración ha aumentado las oportunidades de trabajo y los niveles salariales de otros trabajadores. También es posible que los extranjeros aporten un beneficio fiscal neto a la nación, pues a menudo sus pagos de impuestos superan su uso de los servicios públicos. los inmigrantes llegan a este país buscando una vida mejor y con sus inversiones personales y su arduo trabajo, generan beneficios económicos para ellos mismos y para el país en conjunto.
VI SITUACION ACTUAL DEL MOVIMIENTO MIGRATORIO A LOS ESTADOS
UNIDOS
Para lograr una mayor descripción del fenómeno, es
conveniente no pasar por alto cuatro aspectos que son fundamentales para su análisis:
a ) Las condiciones económicas de las comunidades expulsoras,
b ) La formación del flujo migratorio
c ) Otras implicaciones del flujo migratorio
d ) Aspectos macroeconómicos y de política que lo determinan
a ) Las condiciones económicas de las comunidades expulsoras:
Es evidente que la "gran mayoría de las comunidades expulsoras presentan condiciones de atraso y marginación"4. No obstante que a lo largo del tiempo dichas condiciones han tenido modificaciones, no han sido suficientes para frenar el flujo migratorio hacia Estados Unidos de Norteamerica. Hay que mencionar que dichas comunidades pertenecen en su mayoría a los estados occidentales del país, mismos que presentan un grado de desarrollo comparativamente bajo. En estas regiones predomina la agricultura tradicional, aunque en algunas ya hay procesos de modernización, pero para cada región hay que considerar otros aspectos importantes, tales como:
- La Tradición migratoria,
- La existencia de redes sociales que facilitan la
migración, y
- El ciclo económico de las familias
Por otra, parte también influyen las características geográficas, ya que en ocasiones impiden la integración regional, ya sea con la comunidad innmediata o con las regiones urbanas del país.
b ) La formación del flujo migratorio.
La población tendiente a la migración generalmente se constituye de hombres de entre veinte y veintiocho años, pertenecientes no solo a familias de bajos recursos, sino también a familias de ingreso medio y con nivel académico sutilmente superior a la media nacional5. La mayoría son
casados y se dedican a la agricultura y en los últimos años este patrón ha tomado otros rumbos.
c ) Otras implicaciones del movimiento migratorio
El flujo migratorio repercute tanto en las comunidades expulsoras como en las comunidades de destino; en las primeras, porque representa una fuga de población joven y en ocasiones bien capacitada, y esto repercute en el desarrollo regional . Sin embargo, esta opinión no es compartida por todos los miembros de las regiones de costumbre migratoria; en otras lo ven como un beneficio, máxime cuando proviene de las regiones con altos índices de desempleo y subempleo con bajo nivel de
desarrollo.
Por su parte, en la economía de Estados Unidos surte un efecto favorable pues los empresarios de este país, al
contratar mano de obra barata, se permiten reducir costos y ofrecer bienes y servicios a menor precio.
d ) Aspectos Macroeconómicos y de política
Hasta hace algunos años el movimiento migratorio había tenido un comportamiento distinto, por una parte la crisis económica, y por otra, la Ley Simpson Rodino ha sido aprovechada como conyuntura para muchos individuos e incluso familias completas, que carentes de documentos legales, se hicieron de ellos para utilizarlos en el mejor momento.
Uno de los factores de trascendental importancia es la crisis que vive nuestro país y que dá la pauta para la promoción de este fenómeno, a tal grado que ya no solo son las tradicionales zonas expulsoras, sino que se han integrado otras nuevas tanto rurales como urbanas intermedias y hasta metrópolis.
Sin embargo, esto no constituye la totalidad del fenómeno en nuestros días; pues por su parte las mujeres ya empiezan a ser importante objeto de estudio para los especialistas, dado que presentan un grado de estudios superior a la media masculina y su concentración en mercados de trabajo urbanos también es mayor, principalmente en California y estados de la costa Este; esto se debe básicamente por el grado de maduración de la redes migratorias y por el dinamismo que presenta la economía de dichos estados
Como lo describe Bustamante (1988)6, se ha llegado a sugerir el estudio por separado de la migración indocumentada, dada la relativa independencia que presenta el sexo femenino.
Indudablemente, dadas las actuales condiciones del país, el flujo migratorio está superando su tradicional comportamiento; esto debería suponer una mayor atención en el desarrollo de las regiones con tradición migratoria.
Por su parte las técnicas de investigación acostumbradas ya no permiten desarrollar conclusiones del todo acertadas, por lo
cual se ha procurado mejorarlas, con la finalidad de obtener
resultados que puedan permitir abordar el problema de una forma conveniente, tal es el caso de CONAPO, que en su proyecto ya considera el flujo de mujeres obreras calificadas y profesionistas (CONAPO 1992).
-
Lugar de origen.
Alrededor de las tres cuartas partes de los indocumentados, proviene de las regiones rurales y semi-urbanas. Los estados mexicanos que aportan mayor número de migrantes, son Guanajuato, Jalisco, Chihuahua, Zacatecas y Michoacán. En términos generales, se cosidera que los estados ya mencionados, no son precisamente los económicamente más sub-desarrollados, ni los más cercanos al territorio estadounidense; de ahí que la emigración, se deba además de a la tradición de hacerlo desde hace muchos años.
- Empleo y Salario en México.
La gran mayoria de los indocumentados, tenían empleo7 en México antes de emigrar hacia los Estados Unidos, de acuerdo
con la Centro Nacional de Información y Estadística del Trabajo (CEINET), 64% laboraba antes de partir y el 35.3% era desempleado ó personas que ejercían parte del trabajo familiar. De lo anterior se desprende que si bien es cierto, la importancia que aún guarda el sector primario* , como expulsor de trabajadores hacia el extranjero, no son los desempleados quienes emigran hacia Estado Unidos, sino mano de obra que abandona su trabajo con el fin de encontrar otro mejor remunerado para incrementar su ingreso familiar, en 1995 el salario promedio en México para un trabajador agrícola sin tierra era de $ 1.53 dólares diarios, en los Estados Unidos un trabajador agrícola sin documentos ganaba $ 6 dólares la hora, una diferencia de ingreso de 13 a 1.
Mejorar condiciones de trabajo económicas en México, acelerar el desarrollo en ciertos sectores críticos que están relacionados con los patrones de migración el mejoramiento de la infraestructura del sector agrícola y fomentación del desarrollo industrial, implicarían una considerable disminución en el flujo migratorio que a su vez repercutiría en el propio desarrollo del país.
- Formas de entrada.
Es ampliamente conocido que la mayoria de los trabajadores indocumentados mexicanos son [entrants without inspection], es decir que ingresaron al territorio estadounidense, sin haber sido inspeccionados por las autoridades de migración.
Es usual que el mexicano que desea ingresar a Estados Unidos lo haga por medio de un "pollero", "coyote" o "enganchador", a quien deberá pagar una cantidad importante que varia de acuerdo a los siguientes factores: a)el punto de cruce, b) la relación
del "coyote" con las autoridades fronterizas, (tanto de un país como del otro), y, c) la distancia que haya que recorrer. Se calcula que la suma requerida es de 350 y 500 dólares por persona. Si el aspirante no utiliza los servicios del "coyote", es porque seguramente tenga conexiones con otros mexicanos que
se encuentran ya en los Estados Unidos, quienes le ayudaran a
penetrar y conseguir trabajo en ese país.
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Lugar de destino
Los estados preferidos, por los mexicanos indocumentados, son los del sur, especialmente California (50%),Texas (21.2%) e Illinois (7.9%), California se considera uno de los estados mas ricos y donde hay gran cantidad de trabajos agrícolas, en Texas se pagan los salarios más bajos y en Illinois se ofrecen los empleos de clasificación mas alta.
e) Actividad económica en Estados Unidos
Tradicionalmente el indocumentado mexicano ha desempeñado labores en el sector agrícola, usualmente se le contrata en el campo donde los salarios son pobres, se requiere de baja calificación y se desempeñan labores sucias y difíciles. Asimismo algunos sindicatos han señalado que para algunas cosechas en especial de cítricos (la peor pagada y la más dura que se lleva a cabo), utilizan por lo general fuerza de trabajo ilegal, debido principalmente a que el personal local prefiere obtener el seguro de desempleo a tener que desempeñar tareas de este tipo. Sin embargo a partir de la década de los setentas ha ido aumentando la importancia de empleos en otros sectores8, esta situación se atribuye a que varios trabajos de índole agrícola se han eliminado debido a la creciente mecanización del campo, a que las tierras se han destinado para uso
industrial y residencial; ya que hay más plazas de baja calificación disponibles en el comercio, la industria, la construcción y los servicios.
- Salario.
Debido a su caracter de ilegalidad, los salarios percibidos por los trabajadores indocumentados se caracterizan por ser mas bajos que los de los ciudadanos estadounidenses que desempeñan identicas actividades, además de que los montos van de acuerdo al sector económico en que se trabaje y a la region geográfica en que se encuentre (en 1976 los trabajadores no documentados percibieron como promedio-hora 2.66 dólares, contra 4.47 dólares por hora, pagados a los trabajadores locales).
- Tiempo de permanencia.
La mayoría de los que emigran a Estados Unidos, lo hacen de manera temporal, por un período aproximadamente de seis meses, tienen una marcada preferencia por vivir en México permanentemente, las principales razones que el indocumentado ha esgrimido al respecto son:
El alto costo de la vida en la unión americana, el ritmo acelerado de trabajo, la dificultad de llevar consigo a sus familiares, el clima extremo (sobre todo en invierno), y la discriminación racial.
Debido a que el trabajador indocumentado permanece alrededor de seis meses en los Estados Unidos, se puede afirmar que no produce el mismo impacto económico y político que otros extranjeros que llegan de lugares más lejanos estableciéndose por períodos significativos.
f) El trabajador indocumentado en el mercado laboral norteamericano.
Durante la década de los setentas, diversos sectores de los Estados Unidos (Gobierno, legisladores, sindicatos y la opinión pública), concedieron especial atención al fenómeno de la inmigración de trabajadores indocumentados a ese país. Dichos sectores dejaron saber, a través de los medios de comunicación masiva, que los ilegales constituían un elemento negativo para su economía.
Uno de los argumentos expuestos fué que los extranjeros indocumentados compiten por los mismos empleos que sus ciudadanos, desplazando a un número importante de ellos; que si los norteamericanos ocuparan los puestos absorbidos por los ilegales, la tasa de desmpleo descendería significativamente; que el indocumentado deprecia las escalas salariales en el mercado laboral; que el uso que éste hace de los servicios sociales es mayor que las contribuciones que hace al Fisco y al Seguro Social a través de los impuestos retenidos y que la mayoría de los extranjeros ilegales se establece permanentemente en su territorio, imponiendo una carga pesada a la sociedad norteamericana. Se considera de suma importancia determinar la magnitud de la migración para poder medir su impacto económico en el mercado laboral norteamericano. Sin embargo, debido a su carácter clandestino es imposible saber con certeza el número exacto de indocumentados que actualmente se hayan en ese país.
Debido a que existe una gran diferencia entre los cálculos realizados por el sector académico y el Gobierno estadounidense, se estima que éste ha utilizado cifras infladas (Académicos 7 Millones y el Gobierno 15 Millones), para
manipular a la opinión pública. En época de crisis económica se pretende acatar a los indocumentados la responsabilidad del desempleo que aqueja a esa nación. La declaración común de que "si solo la mitad de los empleos ocupados por ilegales, fueran tomados por ciudadanos estadounidenses, la tasa de desempleo bajaría significativamente".
Este argumento se contradice con lo declarado en varias ocasiones por los empresarios agrícolas norteamericanos, en el sentido de que necesitan importar mano de obra para levantar sus cosechas, dado que no hay suficientes trabajadores legales dispuestos a realizar este tipo de actividad. La postura
oficial ha influido entonces en la opinión pública en el sentido de que el extranjero ilegal desplaza al trabajador local. Posee la condición simplista de que existe un número
determinado de empleos para sus ciudadanos, y que los inmigrantes constituyen una amenaza. Por tanto dicha opinión considera que el mexicano indocumentado está desplazando a su propia fuerza de trabajo.
Es fácil comprobar la falsedad de tal argumentación, ya que los extranjeros indocumentados ocupan en ese país los puestos peor pagados y los de más baja calificación en el mercado laboral.
Tales empleos además, son repudiados por los locales (norteamericanos), pues implican tareas físicamente penosas y sucias, jornadas extensas, condiciones pobres de desempeño y baja seguridad laboral; así mismo, son ocupaciones que rara vez ofrecen oportunidades de mejoras, tanto en el plano salarial como en el de capacitación y el social. El hecho de que los mexicanos indocumentados tengan poca dificultad para encontrar trabajo, sugiere que éstos poseen habilidades especiales para desarrollar tareas despreciadas por los norteamericanos, a quienes les resulta más atractivo cobrar el seguro de
desempleo. Si en realidad los indocumentados desplazaran al trabajador local en aquellas regiones donde los primeros tienden a concentrarse, se observaría una tasa de desempleo más alta. Los planteamientos ya señalados indican que el
indocumentado no sólo no desplaza al norteamericano de su mercado laboral sino que a largo plazo, lo ayuda a tener una movilidad ascendente, es decir, a obtener mejores empleos y por tanto, a alcanzar un estatus social más alto.
Los norteamericanos durante los últimos años no han tenido una porción significativa de este tipo de trabajos, especialmente en el sector agrícola: Los únicos posibles competidores de los indocumentados en épocas de crisis
económica, son los grupos minoritarios integrados por chicanos y negros, que son los menos preparados por poseer bajo nivel
educativo.
En términos generales, los salarios por abajo del mínimo pagados a los indocumentados es una arma de doble filo, ya que por un lado provoca, a corto plazo que se deprecien las escalas salariales de los trabajadores con baja calificación y por el otro ocasiona que los patrones que contratan ilegales logren una mayor acumulación de capital al bajar sus costos de producción, por lo que a estos contratistas se les vuelve indispensable su presencia.
Respecto a los servicios sociales (Educación, Salud,
Asistencia Familiar, Bonos para Alimentos, etc), los
indocumentados hacen poco uso de ellos durante su breve estancia en los Estados Unidos y que cuando lo hacen, su costo resulta menor que las contribuciones que aportan al Fisco, por lo tanto la economía estadounidense se beneficia con la
presencia del trabajador indocumentado, ya que durante su estancia, éste deja entre el 60% y 70% de sus jornales en pagos al Fisco, al Seguro Social y por la compra de bienes y servicios.
El gasto de cualquier consumidor crea empleos, asimismo, los dueños de empresas agrícolas e industrias pequeñas espcialmente los del suroeste, obtienen grandes beneficios pues mantienen bajos sus costos de producción, debido a que pagan salarios por debajo del mínimo y así se mantienen competitivos tanto con los grandes monopolios como en el ámbito externo.
Las consecuencias inmediatas que traería la escacez de mano de obra indocumentada en la economía estadounidense sería:
Incremento de los precios de los bienes al consumidor, con su consecuente aumento en la tasa de inflación, tendencia a mecanizar el trabajo y pérdida de empleo de trabajadores mexicanos. Lo más probable es que el resultado de una situación de esta índole lleve a una tasa de crecimiento más bajo.
g) Ley Simpson Rodino
La primera Ley en materia de migración tiene su fundamento en la XIV Enmienda, Sección primera de la Constitución de los Estados Unidos y fué promulgada en 1940, pero fue sustituida en 1952., por la Ley de Inmigración y Nacionalidad. Durante tres décadas, se presentaron varios intentos fallidos para
reformarla, siendo uno de los últimos el proyecto SimpsonMazzoli, que fue introducido para su discusión en marzo de 1982, pero fue hasta el 6 de noviembre de 1986, en que fue aprobada la Ley de Reforma y Control de Inmigración (IRCA), comúnmente conocida como la Ley Simpson Rodino. La filosofía que se traduce de dicha Ley es la de "recuperar el control de sus fronteras".
Las reformas constituyen modificaciones a siete títulos de la Ley:
IControl de la inmigración ilegal
II Legislación
III Reformas a la inmigración legal
IV Reformas al Congreso
VAsistencia a las entidades federativas, para los costos de encarcelamiento de extranjeros ilegales.
VI Comisión para el estudio de inmigración
internacional y cooperación para el desarrollo
económico,
VII Competencia federal para las aportaciones y exclusiones de extranjeros convictos de delitos
El título primero se desagrega en tres apartados, que son:
· Empleo
· Vigorización de las medidas de control,
· Verificación del estatus migratorio.
Esto se traduce en sanciones para las personas que contraten los servicios de extranjeros que no tengan su documentación migratoria en orden; medidas para el reforzamiento de las actividades en SIN (Servicio de Inmigración y Naturalización), pero "muy especialmente de la patrulla fronteriza", así como rígidas penalizaciones a quienes introduzcan o transporten ilegales hacia los Estados Unidos (CONAPO 1992).
Es ahora cuando se declara ilegal la contratación de
personas que carezcan de documentos legales de migración, no
así en la ley de l952, conocida comúnmente como Ley WalterMcArran, en la que se decía que era ilegal trabajar sin documentos en los Estados Unidos, pero en ningún caso se sancionaba a los empleadores que abusaban de su condición.
Actualmente se menciona que toda persona que pretenda contratar a un extranjero debe comprobar que éste posee la documentación
necesaria; y debe guardarla en sus archivos y exhibirla a las autoridades competentes cuantas veces le sean requeridas.
Con respecto a la discriminación, ésta no la constituye el hecho de que un patrón prefiera a un nacional, en lugar de un migrante, en condiciones iguales; pero para esto se establece
un Consejo Especial a fin de analizar cualquier queja de discriminación en relación a prácticas ilegales de empleo con motivo de una situación migratoria.
El segundo título de la ley, es sin duda el más relevante, pues se refiere a la regularización de la población migrante indocumentada. Esto se podrá realizar siempre y cuando aquel extranjero que haga solicitud, haya vivido de manera
ininterrumpida hasta antes del 1o. de enero de l982. La residencia temporal se podrá cambiar por la definitiva después de 18 meses de la entrada en vigor de la misma ley, solo
después de que comprueben un mínimo conocimiento de Inglés, de historia, y del Gobierno de Estados Unidos.
Sin embargo, el trabajador mexicano se distingue del resto de la migración internacional, pues el patrón de conducta de éste, es de permanencia temporal; de hecho el promedio de
estancia del migrante mexicano es de cuatro a cinco meses, ya que regresa a su lugar de origen para estar con su familia; este es un aspecto que la IRCA simplemente ignora. "De ahí que hubiera sido más razonable la celebración de un acuerdo
bilateral mexico-estadounidense, en el cual se pactaran visas de entrada y salida para los trabajadores mexicanos...".9
El tercer título, que comienza refiriéndose a los
trabajadores agrícolas, establece la implantación del programa H2A, y nos dice que cuando no exista un número suficiente de trabjadores, se podrá solicitar la internación de éstos, siempre y cuando no afecte negativamente el nivel de salarios y en las condiciones generales de trabajo; la consideración se dará bajo la autorización del Secretario de Trabajo, ya sea a través de asociaciones de productores o individualmente por cada patrón. De aquí se establece una Comisión Consultiva que funge como mecanismo de consulta con el Gobierno Mexicano y pueda asesorar al Procurador General.
A juicio de algunos funcionarios del CONAPO, se debe evitar el contacto con la comisión, por el supuesto de que es un acuerdo que debió plantearse antes de la aprobación de la ley y no a posteriori.
Para los casos de naturalización, a estos se les niega el servicio de seguro social por un período de cinco años. Esto, entre otras cosas constituye lo más relacionado con los trabajadores migrantes que se estable en los textos de la
IRCA. Pero a juzgar por la persistencia de los flujos migratorios hacia Estados Unidos, se puede afirmar que la legislación IRCA está muy distante de haber alcanzado su propósito principal de acabar con la entrada de migrantes indocumentados. Se podría adelantar la hipótesis de que tal legislación no se hizo para eliminar la entrada de migrantes indocumentados, tanto como para responder políticamente a las razones ideológicas que estuvieron detrás de las propuestas más restrictivas, como la resumida en la frase: "We have lost
control of our borders". Un país que deveras ha perdido el control sobre sus fronteras se preocuparía cuando menos de colocar una indicación oficial de donde esta la frontera en el punto de cruce de indocumentados más intenso de toda la
frontera norte, como es el caso del Cañón Zapata. En ese lugar
no hay ninguna indicación oficial de la ubicación de la frontera internacional.
h) Iniciativa 187 " Propuesta derogada "
Otro aspecto de caracter jurídico que implica al movimiento migratorio, lo representa en términos actuales la comunmente conocida como propuesta 187, la cual encuentra su principal expositor en Pete Wilson. En lo que respecta a esta iniciativa, que se refiere a la negación de los servicios sociales (Educación, Salud, Vivienda, etc.), tanto a los migrantes ilegales como a su progenie, podemos afirmar que representa una frustración de parte de los ciudadanos del sur de Estados Unidos, con la inhabilidad del Gobierno Federal para dar cumplimiento efectivo a las leyes de migración. Esta Ley
supone una obstaculización para el establecimiento de los
trabajadores migrantes y sus familias. Pero dado que para su economía, la afluencia de mano de obra barata la afecta favorablemente, es más conveniente tenerlos por períodos cortos
a que lleguen a ser una carga para el gasto social.
Por su parte, algunos norteamericanos, al igual que los inmigrantes están en contra de la aprobación de esta Ley. La
juez federal de distrito, Mariana Pfaelzer10, afirmó que ese estado "carece de autoridad para poner en práctica su propio esquema, para reglamentar la inmigración o para idear reglamentos que sean paralelos a las leyes federales de inmigración o que pretendan complementarlas". El abogado Fred Kuments, representó a varios niños inválidos que serían afectados por la polémica iniciativa, al momento que agregó: "La propuesta 187 ha sido efectivamente anulada por las cortes federales".
Estas acciones, entre otras, denotan la inconformidad de los demás estadounidenses ante la iniciativa, que generó gran polémica cuando en noviembre de 1994, fué aprobada en un referéndum por la población californiana. En esta misma fecha el Gobierno mexicano resintió el efecto de la población norteamericana para sus connacionales, mismo que durante las últimas décadas no ha querido dar solución a la situación migratoria; y esto supone que busca seguir manteniendo la "puerta trasera", abierta para que miles de mexicanos, puedan seguir integrando el mercado estadounidense.11
Pero la continuidad del movimiento migratorio ha implicado al Gobierno mexicano, por decir algo, desde la década de los cuarenta, cuando se inició el Programa Bracero (1942-1964), por medio del cual se otorgaron más de cuatro millones de permisos de trabajo, y su larga duración afianzó la institucionalización de la migración en las comunidades mexicanas. Ejemplo de estos es la asombrosa organización que ha desarrollado la comunidad mixteca12, en los años más recientes, y no está por demás que para quienes pudieran dudarlo, pueden marcar en California el 1800-Mixteco, para recibir asistencia legal en Inglés, Español y Mixteco.
Po otra parte, hay personas que en algunos estados del país
desarrollan su vida más conectada a Los Angeles que con las ciudades mexicanas más cercanas, como es el caso de Jalisco y Michoacán. Esto es el producto de un desarrollado sistema de comunicación que durante tres generaciones han conseguido los trabajadores migrantes con sus familiares. También podemos apuntar a la facilidad con que éstos encuentran trabajo del
otro lado de la frontera. Gracias a que en la época de los años setenta, se pronunció de manera desemedida el flujo migratorio, entre las comunidades norteamericanas comenzó a gestarse un movimiento restriccionista que ahora pretende consodlidarse en la prouesta 187.
Pero para no meternos en honduras podemos enfatizar tan solo que la propuesta 187 es una exageración de parte de algunos políticos oportunistas como es el caso de Pete Wilson, y los grupos blancos supremacistas (Ku klux Klan), y que representa entre otras cosas la inoperabilidad de sus propias leyes migratorias.
Por su parte el Gobierno mexicano tras la aprobación en noviembre de 1994, de la propuesta 187, desarrolló un debate en el cual se propone la doble nacionalidad de los trabajadores mexicanos, que lleguen a obtener su legalización dentro de Estados Unidos, sin embargo, no ha logrado consumarse. De esta forma se está avanzando en el tema de migración, pero lejos está el día en que este mismo tema esté contemplado en su totalidad por los gobiernos de ambos países13 "Por esa razón, ni el éxodo de México ni su integración en Estados Unidos, son hechos definitivos".
I) Discriminación Racial
El problema de la violencia racial supone una de las más
importantes repercusiones del movimiento migratorio, y básicamente para los trabajadores que se asientan en las localidades de antemano marginadas. Su análisis implicaría un estudio más amplio debido a la importancia y elementos con que se cuenta para ello; no obstante en esta ocasión lo hemos de considerar en sus aristas más generales.
La discriminación racial es tal en Estados Unidos de
Norteamércia que se ha llegado a etiquetar a los
indocumentados en dos categorías:
"Los prejuicios estadounidenses contra diversos grupos de origen extranjero se pueden dividir en dos tipos, los que llamaremos "los tontos" y "los pícaros". El estereotipo
de los tontos dice: El Típico A, tiene un coeficiente intelectual bajo y es alérgico al agua y al jabón. No
tiene estudios; es demasiado "torpe", y flojo para
aprender bien Inglés; es incapaz de hacer otra cosa que no sea trabajo no calificado; se inclina al crimen violento y al alcoholismo, tiene un temperamento violento . Por otro
lado el "picaro" o "pillo" tiene un alto coeficiente intelectual y puede ser físicamente limpio. Tiene estudios y se considera demasiado bueno para el trabajo manual; es deshonesto y no se puede confiar en él; se inclina por lo crímenes legales y económicos, propios de los empleados de oficina, de desfalco, soborno, fraude, evasión fiscal, espionaje industrial, competencia de
precios, etc. Por regla general, cualquier grupo nuevo de inmigrantes puede entrar en la categoría de tontos, hasta que dicho grupo, o sus hijos aprendan Inglés, y entonces puede pasar a la categoría de pícaros"14.
En nuestro estudio hemos encontrado que cada día son más
frecuentes los actos de intolerancia y racismo contra la comunidad latina que vive en el área de Los Angeles, ya sean obra de la patrulla fronteriza o de las organizaciones civiles, así como por parte de mismos norteamericanos que repudia a los "morenos".
Organizaciones tales como la Alianza Nacional de la
Milicia Cristiana y el Ku Klux Klan, son los que más actividad han ejercido; Dean Compton, líder de la susodicha alianza, declaró en una entrevista personal: " La
Constitución nos permite utilizar la fuerza contra fuerzas invasoras", pero por su parte Cassandra Oduen, investigadora de la organización Klanwatch, aseveró que las declaraciones de Compton son ampliamente exageradas y que su grupo quizá llegue a los quince miembros en vez de 2,500 que él asegura, se interpondrán entre México y Estados Unidos para impedir el flujo migrante.
Pero los casos de racismo no tan solo implican a los elementos mencionados anteriormente, pues ya cual más quiere colgarse la etiqueta de héroe nacional, esto es porque al golpeara algún latino o en concreto, mexicano; es aclamado por las masas (una de las implicaciones de la tendencia fanática del pueblo estadounidense). Ejemplos de ésto, los encontramos a la vuelta de la esquina; en el Consulado de México en Los Angeles, las cifras indican que los casos de discriminación para 1995, aumentaron en un 25%, mientras que las autoridades del mismo Condado reportan que el número de "crímenes de odio" han disminuido.
Para evidenciar a grosso modo la actitud anti-inmigrante del pueblo norteamericano, citaremos algunos casos que se saturan de absurdo.
En primer lugar está el caso de César Arce, de 18 años de
edad, hijo de padres mexicanos: "Arce y su amigo, David Hillo fueron baleados por Andrew Masters, un aspirante a actor y experto en artes marciales. El individuo sorprendió a los muchachos cuando pintarrajeaban una pared y dijo a los policías que los "pandilleros", lo habían agredido.15 A pesar de que Hillo aseguraba que no llevaban arma alguna, las autoridades decidieron no presentar cargos contra Masters, quien se convirtió en una especie de "héroe de la ley y el orden" entre algunos sectores conservadores".
Por su parte los grupos policiales también tienen su historia. Santiago López García, un michoacano de 17 años de edad, que el 2 de abril de 1995, caminaba por la calle con un encendedor en forma de pistola de mano, provocó que una agente de la oficina del sheriff de Los Angeles le dispararon en dos ocasiones; Una vez que cayó herido el oficial volvió a dispararle, directamente a la cabeza.
El 2 de enero de 1994, Willie Dyer, elemento del cuerpo de bomberos golpeó a José Luis Arellano. El Joven mexicano tenía 18 años de edad y murió a consecuencia de la golpiza.
De los casos anteriores podemos deducir que el problema de la violencia racial no es posible controlarlo ni siquiera por los mismos organismos gubernamentales estadounidenses, mucho menos por los que no están del otro lado de la frontera. Organizaciones como el Grupo Alfa en Tecate y Beta en Tijuana procuran la defensa de los derechos humanos de los
trabajadores mexicanos, no consiguiendo su objetivo en forma tangible.
VII C O N C L U S I O N E S
La problemática del empleo productivo en México que permita satisfacer las necesidades básicas de la vida moderna, no es exclusiva del sector agropecuario sino que afecta a la
totalidad de la economía del país. El sector industrial no ofrece oportunidades de empleo suficientes para los requerimientos de la población (fuerza de trabajo), situación que parte del sector agrícola o de los sectores con tecnología atrasada.
El aparato productivo se ve altamente restringido en su capacidad de empleador, dada la estructura de una demanda fuertemente concentrada y dadas las tecnologías que se utilizan para satisfacerla.
De acuerdo a la información recabada llegamos a la
conclusión de que a largo plazo, la solución a este problema radica sobre todo en los esfuerzos que realice el Gobierno mexicano para mejorar las condiciones económicas de la nación. En sí, el mejoramiento de los patrones de crecimiento económico de México reduciría el flujo migratorio automáticamente, ya que el factor principal del movimiento migratorio a Estados Unidos es el bajo desarrollo de ciertos sectores de la economía mexicana, para lo cual el Gobierno de México deberá mejorar estos condicionamientos de vida para detener esta situación.
El problema migratorio es de carácter coyuntural, puesto que mientras los sistemas económicas no cambien, no se podrá dar una solución definitiva
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Verea, Campos, Mónica, (1985), Entre México y los Estados Unidos "Los indocumentados", Ediciones el caballito, Mexico D.F.
_______________________________
1 Según los términos del Tratado de Guadalupe Hidalgo, (12
de Febrero de 1848), México cedió una gran porción de su territorio a los Estados Unidos. La línea de demarcación que seguía el Río Grande era bastante clara, pero al Oeste de El Paso, los negociadores se guiaron por un mapa equivocado. Las discusiones y discrepancias posteriores, estuvieron a punto
de causar una segunda guerra. Finalmente se envió a James Gadsden a la ciudad de México a negociar una nueva adquisición. La línea original de este tratado, debió haber seguido el curso del Río guía a a través de Arizona, por ser esta la demarcación más razonable y natural, pero Gadsden consiguió comprar casi 114000 km2 adicionales. Con esta adquisición en 1853, quedaron incluidas unas de las minas de cobre más ricas del mundo.
2 Es indudable que el hecho de mantener el flujo ilegal en lugar de regularlo por medio del Programa de Braceros, sirvió mucho a las empresas agrícolas. Los patrones y los trabajadores se vieron libres de los procedimientos burocráticos y se privó a los trabajadores de la oporotunidad de obtener poder político organización sindical y derechos laborales, Franklin S. Abrahams en La Política de Inmigración de los Estados Unidos , 1989, México, D. F., Ediciones Gernika., p.192
3 En una primera fase, tal proceso de contracción ha sido más virtual que efectivo, veáse artículo de Bolívar, Augusto, Romero, Miguel Angel y Robles, Francisco, publicado en el Cotidiano núm. 14, Nov-Dic. 1996.
* Son las fuerzas económicas y políticas que concurren a la formulación de la intervención del estado.
4 Verea Campos, Mónica, Entre México y los Estados Unidos: Los indocumentados, Ed. El Caballito, México D.F. 1995
5 Cornelius, Wayne, (1978), Mexican Migration to The United States: Causes, Consequences and US Responses, Center for International Studies, Edit. Mit.
6 Bustamante Jorge A., (1988), Migración de Indocumentados de México a Estados Unidos, Fundación Friederich Ebert, México. 7 Migración Interna, Tomo II, Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática, (1995), Aguascalientes, México, p.79
* El Sector Primario comprende las actividades de Ganadería, Pesca y Agricultura.
8 A pesar de que alguna vez los inmigrantes ilegales se concentraban en los empleos agrícolas de los estados del sur, ahora residen en todas la regiones del país, se calcula que solo el 15% de los extranjeros ilegales trabajan en la agricultura, el 50% lo hace en el sector servicios y el 30%
son obreros. William French Smith en Richard R. Hofstetter, (1989) La Política de Inmigración de los Estados Unidos, Editorial Gernica, México, D.F.
9 Consejo Nacional de Población (1992) Migración Internacional: En las Fronteras Norte y Sur de México, CONAPO, México, D. F.,
10 Ap.Reuter y Ansa, "Niega una juez a California poder para dictar reglas para migración", La Jornada, 21 de noviembre de 1995, México, D.F.
11Alarcón, Rafael y Martínez, Jesús, (1995), "La doble nacionalidad en una nación de emigrantes", La Jornada, 21 de noviembre de 1995, (La Jornada en Internet - http;// serpiente.dgsca.unam.mx/Jornada index.html) México, D. F.
12 Idem
13 Idem.
14 Bronfenbrenner, Martín en Richard R.Hofsetetter, La política de inmigración de los Estados Unidos, 1989, México, Ediciones Gernika
15 Armendares, Pedro E."Amenazan grupos paramilitares con bloquear la frontera de Estados Unidos con México", La Jornada 23 de septiembre, 1995, México, D. F.